En el número 2 nos encontramos a Edward y Bella.
Aquí hay un amor que literalmente durará para siempre. Esta pareja ha tenido un vínculo intenso desde que se conocieron cuando Bella se mudó a Forks, Washington. Edward estaba tan atraído por Bella (bueno… el olor de Bella) ¡Que ni siquiera pudo asistir a la escuela!. A partir de ese encuentro inicial en la clase de ciencias, Bella y Edward han arriesgado todo para estar juntos.
Y para recordar estos momentos:
“Lo miré de forma furtiva mientras avanzaba por el pasillo para presentarme al profesor y que éste me firmara el comprobante de asistencia. Entonces, justo cuando yo pasaba, se puso rígido en la silla. Volvió a mirarme fijamente y nuestras miradas se encontraron…”
“No alcé la vista cuando deposité el libro sobre la mesa y me senté, pero lo vi cambiar de postura al mirar de reojo. Se inclinó en la dirección opuesta, sentándose al borde de la silla. Apartó el rostro como si algo apestara…”
Páginas 30 y 31, Crepúsculo, Stephenie Meyer
Fuente: Revista Seventeen
Adaptación y Traducción: RobstenChile
via diariotwilight
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